No se puede escribir sobre los
microcoches de los años cincuenta sin mencionar a los motores Hispano
Villiers ya que equiparon a una gran cantidad vehículos tanto motos como
motocarros, tricamionetas y microcoches.
Hispano Villiers, S.A. se fundó
en 1951 para fabricar bajo licencia de la casa británica The Villiers
Engineering Company Ltd los afamados motores Villiers, aunque en los años
anteriores se habían importado alguna unidad e incluso la empresa Harry
Walker, S.A., tuvo la representación en España en los años siguientes a
la guerra civil, pues bién en 1953 se fabricó el primer motor, el 101M
un monocilíndrico dos tiempos de 121,67 cc y 6 CV de potencia a 4.500 rpm,
en 1954 se dio a luz al motor que mas nos interesa, el 6M de 197 cc
primero con tres marchas y posteriormente con cuatro, que es el que equipó
a la mayoría de microcoches y motocarros e incluso a alguna motocicleta.
Posteriormente en 1958 se construyó un bicilíndrico de 250 y 325 cc que
en versión de arranque eléctrico y refrigeración forzada también se
montó en algún microcoche. En 1960 se cesó la producción de motores
Hispano Villiers y la empresa se transformó en Hispanomotor, S.A. y se
dedicó a fabricar los motores Lombardini, bombas de agua, motores
industriales, etc.
Las marcas que utilizaron este motor fueron: AISA,
AUTO-TRI, BISCUTER, COFERSA,
DELFIN, FH, GAITAN,
HURACAN, JUNIOR, ROA
y SAMOES.